¡La Emancipación del Siglo XXI en Colombia, es ahora o nunca!

¡La Emancipación del Siglo XXI en Colombia, es ahora o nunca!

“Vamos todos a coger banderas de Colombia y buscar su dignidad”

Artículo de: Juan David Rivera

Lo primero que veo cuando llego a mi casa es el diploma de mi padre de la Universidad Nacional de Colombia, lo que me siento orgulloso y siento tristeza de no haber cumplido con la meta de pasar el examen de admisión, por lo que gracias a la formación y oportunidades que se le abrieron a mis padres por ser de la Universidad Pública pude estudiar en la Universidad Jorge Tadeo Lozano y tener el honor de ser Representantes de Estudiantes ante el Consejo Directivo, y actualmente tener privilegios para no ser egoísta.

Colombia, presenta altos niveles de desigualdad social, “La desigualdad en Colombia es superior a la de la mayoría de los países en la región. Según los últimos datos publicadas por la Cepal, es el segundo país más desigual en la distribución del ingreso en la región. El 1 por ciento más rico de la población concentra el 20 por ciento del ingreso”. Lo anterior, no quiere decir que generemos discursos de odios, de estratificación, de dogmas con “únicas verdades” para exigir a los Gobiernos su cumplimiento, lo que realmente debemos hacer es pensar en una palabra y es Colombia, un país donde la educación y salud no puede seguir abriendo la brecha de desigualdad social, como a diario se ve, unos ejemplos:

• ·       La atención de urgencias y servicios de las EPS.
• ·       La ausencia de financiación para la Ciencia, Tecnología e Investigación.
• ·       Salarios a recién graduados miserables, y muchas veces sin sus prestaciones sociales.
• ·       Pensiones que sirven para sobrevivir y no subsistir. Unos fondos privados de pensión que engañaron a la gente.
• ·       Programas como “Ser Pilo Paga” que financiaron a las Universidades Privadas y perjudicaron al Presupuesto de las Universidad Públicas.
• ·       Servicios de Transporte Público que no generan un respeto a la dignidad del ser humano.

Son algunos ejemplos, pero seguimos anestesiados. Tenemos que ver al servidor público como aquel que nos debe guiar a tener una Colombia justa, y no como un “dios” que nos hace favores cuando le roguemos, supliquemos y si el dispone nos abre el camino, eso se debe acabar. Por consiguiente, el actual Presidente Duque y los Ex Presidentes, Ex Candidatos Presidenciales de Colombia que siguen en el debate político tienen una responsabilidad en hablar sobre el fortalecimiento de la Educación y Salud Pública, y no seguir en peleas bochornosas donde demuestran a diario que los ciudadanos son un juego para ellos. Al mismo tiempo, se debe acabar de raíz la realidad que donde en la familia que se nazca es como se marca el destino, donde la esencia de un Estado Social de Derecho debe promover la igualdad al momento de nacer (brindar oportunidades de educación, salud y justicia dignas).

Se avecinan paros de centrales obreras, movimientos estudiantes y por qué no se agremian los sindicatos de todos los sectores como los de salud, justicia para pedir reformas de avanzada. Es momento que Colombia pare en el camino, pensemos en unidad, SIN DOGMAS, como ciudadanos libres y busquemos una hoja ruta para que en 20 años logremos caminar en calles, municipios y ciudades, y todos los niños estén orgullosos de sus escuelas, los docentes sean tratados dignamente, las Universidades tengan fortalecimiento en educación, el campesino tenga dignidad y adquiera con justicia sus títulos de propiedad, las reformas laborales permitan acabar modalidades contractuales de esclavitud (contratos de prestación de servicios), entre otras causas que cada uno de ustedes completen.

Mi llamado es, es el momento de empezar a pensar en grande por Colombia, que entre todos hagamos debates para el mejoramiento y aislar los dogmas de la extrema derecha e izquierda. Por esas razones, si suspenden un semestre por una causa que es la dignidad del Derecho a la Educación Pública, pues que lo cancelen o pensar que las cátedras sean en las calles como es la esencia de la libertad, sin necesidad de suspender semestre. Que las centrales obreras propongan mejoramiento de la modalidad contractual y superemos la informalidad laboral, Que los pensionados salgan y exijan dignidad, y no más impuestos que no les permitirán tener una vejez digna. Que los que somos privilegiados como yo, nos preparamos y apoyemos ideas de cambio desde nuestras profesiones y pedir radicalmente a nuestros Gobernantes que respeten la Constitución Política. Que las religiones no fomenten fanatismos de división y contribuyan al mejoramiento de la sociedad, y no fomentar discursos discriminatorios como es el caso de la “ideología de género”. Que las personas de discapacidad sean incluidas, y por último todos los colombianos sepamos que la única forma de lograr una “Paz verdadera y permanente” es vivir juntos en todos los espacios y defender los derechos fundamentales de educación y salud pública, porque así es la mejor bala para combatir el crimen organizado, que se aprovecha de la falta de oportunidades del ser.

Que estas vísperas de navidades, la voz de Colombia se haga sentir y por lo menos nuestros Gobernantes sepan que vienen y se acercan gritos de emancipación. Por eso, si usted está en su casa, oficina, en un bus, carro, saque su bandera o pañuelo y apoye los paros.

Ñapa: Gracias a los movimientos laborales, periodos de la iluminación la humanidad tiene algo de dignidad.